👋🏻 Hey folks
El diseño nos sirve para mucho, entre otras cosas para reflexionar y plantearnos cuestiones que pueden ser todo lo transcendentales que uno quiera. Hoy Sergio Mingo nos invita a ver más allá de lo tangible y a pararnos a pensar sobre el camino al que nos puede llevar nuestra profesión.
Y mirando hacia el futuro, una vez más queremos reflexionar también sobre la historia, en este caso de la mano de Charlotte Perriand, una referente que dotó de vida los asépticos espacios de la renovada arquitectura moderna del siglo XX. Diseños tangibles cargados de agitación cultural.
El arte de lo invisible
por Sergio Mingo
D’où venons nous? Que sommes nous? Où allons nous?
De este modo, quiso concluir Gauguin su obra, su legado y sus días, aunque sin fortuna, ya que la sobredosis de arsénico que ingirió fue rechazada inmediatamente por su cuerpo y le hizo expulsarla antes de procesarla.
De dónde venimos, quiénes somos y a dónde vamos. Enfrentarnos a la realidad no es sencillo, pero es necesario.
El diseño está íntimamente ligado a la creación, tanto a nivel formal como funcional. Es decir, de algún modo, visibiliza o tangibiliza lo invisible, como una especie de vehículo capaz de conectar lo banal y lo trascendental. Sin embargo, paradójicamente, esa visibilidad, o sea, esa capacidad para ver es lo que en muchos casos nos impide tener una visión. Es decir, nos impide ver más allá de lo que vemos.
Gauguin pisó las reglas de la perspectiva, elevando el horizonte mucho más allá de lo correcto, asumiendo ser lapidado. “Sin duda, existe el camino intermedio, que satisface a la gente pero que a mí no me produce ningún placer”.
Situar el horizonte a nuestros pies no nos permitiría ver más allá de ese metro y pico que nos separa del suelo y estaríamos a merced de lo que habríamos convertido en el centro de nuestra estrategia, la supervivencia, la dictadura del cortoplacismo, componiendo una escena desvirtuada donde no hay contexto, solo producto, donde no hay problema, solo solución. Sacarlo del lienzo produciría un desfase inabarcable y perturbaría la escena por completo, nos perderíamos en el problema y el propio contexto impediría la visión.
Ahora bien, podemos situarlo en el camino intermedio “que satisface a la gente” o estudiar la escena y arriesgarnos a ser.
A veces, tengo la sensación de que estamos construyendo una realidad inerte para dotarla de una vida de la que ya disfrutaba, como si necesitásemos reconstruir desde la experiencia para digitalizar nuestras relaciones y convertirlas en algo medible que llamamos verdad.
Pero al mismo tiempo, siento que estamos siendo testigos de una especie de vuelta al realismo, de estar saliendo de los escaparates para pisar la calle, del mismo modo en el que aquellos pintores de Barbizon huían al bosque de Fontainebleau escapando a lo bello y sublime del romanticismo.
Supongo que, en el fondo, el diseño, como la vida, es simple o complejamente esto, contradicciones, conceptos contrapuestos que construyen la realidad desde diferentes perspectivas y que nos obligan a mover la línea del horizonte para poder encontrar la belleza a través de la verdad.
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Charlotte Perriand
A lo largo de la historia las mujeres como Charlotte Perriand han sido invisibilizadas en el mundo del diseño - y en todas las disciplinas.
Charlotte fue una arquitecta y diseñadora francesa. A ella le debemos el concepto de almacenaje doméstico, el mobiliario autónomo y funcional, y la concepción de la casa moderna. Estudió diseño de muebles en París y acabó totalmente desanimada porque no compartía el enfoque de los estudios. Ella encontraba la inspiración en la estética de los coches de motor y las bicicletas de la ciudad.
Con 24 años diseñó ”Bar bajo el techo”, con el que se dio a conocer en el Salón de otoño de 1927. Esta intervención consiguió despertar la curiosidad de Le Corbusier y empezó a trabajar en su estudio. Cabe destacar que en un primer encuentro cuando Charlotte fue a buscar trabajo en su estudio, él le contestó “desgraciadamente, aquí no bordamos cojines”. Después fue el propio arquitecto quien le pidió que se uniera a su equipo.
En 1928 diseño 3 de las piezas más icónicas del arquitecto. Tiene especial importancia la Chaise Longue LC4. Se suele atribuir la autoría a Le Corbusier, cuando fue Charlotte Perriand la verdadera creadora de la pieza. A partir de los años 40 su estilo dio un giro debido a una gran influencia de la estética oriental. Y a los 90 años realiza su último proyecto, se trató de un encargo de la UNESCO para que interpretara la «Maison de Thé». En definitiva, ✨una referenta extraordinaria✨.
Inspiración y recursos
Cerramos la newsletter de hoy con nuestro clásico mix and match de recomendaciones: Empezamos con estos frameworks de de priorización de tareas que nos han compartido por la comunidad y es que más de una vez nos hemos visto con esa necesidad de entender qué es más importante abordar primero en un producto. Y no es tarea fácil.
Pasando al terreno del diseño gráfico, os traemos este archivo de branding donde encontrarás clasificados distintos tipos de marcas que puedes guardarte y agrupar. Está en beta pero promete.
Y por último, si te interesan las míticas composiciones de grid con cards de bordes redondeados que se ven tanto, aquí encontrarás una interesante recopilación.
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